El Consejo Asesor de Infraestructuras de Catalunya ha concedido el Premio a la Mejor Infraestructura 2020 a la nueva terminal de Granels Sòlids de ICL Iberia en el Puerto de Barcelona, obra ejecutada por la delegación de Obra Civil de Cataluña del área de Construcción de Sorigué, a través de su empresa Acsa, Obras e Infraestructuras, junto a la empresa de Dragados.  

 

La infraestructura, formada por un conjunto de edificaciones e instalaciones para descargar, almacenar y cargar barcos de material de potasa y sal, ha sido premiada por reforzar su apuesta por el ferrocarril a la hora de transportar materiales al puerto.  

La terminal consta de 2 hangares de estructura mixta de hormigón-acero de planta rectangular de 240m x 50m y de 150m x 59m respectivamente, separados por un pasillo de 10m de ancho, para el almacenaje de potasa y sal vacuum respectivamente. 

 

Las instalaciones incluyen una zona exterior de almacenaje para sales de deshielo, una terminal de descarga para camiones, una terminal de descarga para, un aparcamiento para camiones, un edificio de oficinas y las plataformas de 4 vías para permitir la entrada y maniobra de trenes en la termina. 

  
Además, en el muelle, se han instalado 2 grúas portuarias para la carga de barcos de gran calaje y todo el circuito de cintas de transporte cubiertas sobre estructura metálica junto con las tolvas y equipos de cribado. 

El Consejo Asesor de Infraestructura de Catalunya ha reconocido a los cuatro agentes implicados en la construcción de la nueva terminal: la UTE formada por la empresa de Sorigué, Acsa, Obras e Infraestructuras, SAU y la empresa Dragados S.A., como constructor; ICL Iberia, como promotor; IDP Ingeniería y Arquitectura, como proyectista y NTi Projects & Construction Management, como dirección de obra.  

 

El jurado ha valorado la colaboración público-privada del proyecto, ya que cuenta con la participación activa desde hace tiempo de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) y el Puerto de Barcelona.  

 

Las nuevas instalaciones también representan notables ventajas medioambientales, así lo ha remarcado el Consejo Asesor: “Cabe señalar también las mejoras medioambientales, con un uso más intensivo del ferrocarril, por una parte, y con los nuevos sistemas de captación del polvo en los puntos de carga y descarga”. 

 

La nueva terminal permitirá doblar la cantidad de mineral transportado por vía ferroviaria hasta el millón de toneladas y aumentando la capacidad de carga anual en barco, de 800 mil toneladas a 4 millones. También se incrementa la capacidad de carga en barco al poder cargar 2 barcos, -un de 70.000 toneladas y otro de 30.000-, frente a los 25.000 que se hacía antes de la infraestructura nueva.