El Ayuntamiento de Barcelona ha elegido la propuesta constructiva presentada por la empresa de servicios a la ciudad de Sorigué, Constraula, en alianza con la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), como una de las tres ganadoras del reto urbano lanzado para mejorar la habitabilidad, el confort o el rendimiento energético de los bloques de pisos de la ciudad.  

 

A partir de este reto, promovido por la Fundación BIT Hábitat, de la mano del Instituto Municipal de Urbanismo y la Gerencia de Urbanismo, Barcelona probará durante un año los tres prototipos de construcción industrializada ganadores, con el objetivo de ampliar edificios de viviendas de forma sostenible. 

 

Las propuestas seleccionadas son estructuras metálicas o de madera que se añaden a la nueva fachada de los edificios. Además, permiten ganar espacio para las viviendas en balcones o zonas comunitarias, poner un ascensor o mejorar el aislamiento y el impacto del sol. También se pueden colocar en las azoteas para añadir paneles solares, cubiertas verdes o reutilizar el agua de la lluvia. 

 

Regenerar Barcelona, la propuesta de Sorigué 

 

La propuesta del grupo empresarial, denominada Regenerar Barcelona, apuesta por una estructura autoportante de madera que se adapta a la fachada de los edificios para ir configurando espacios interiores y exteriores.  

 

Su objetivo es contribuir a mejorar la calidad de la vivienda, el aspecto exterior y el comportamiento energético de los polígonos habitacionales.  

 

El prototipo se ha realizado conjuntamente entre Constraula y los grupos de investigación de la UPC: REARQ – Rehabilitación y Restauración Arquitectónica y GICITED – Grupo Interdisciplinario de Ciencia y Tecnología en la Edificación. 

 

 

Regenerar Barcelona, junto a los otros dos prototipos ganadores, se comenzará a probar durante la primavera del próximo año en el barrio del Besós y el Maresme y en otras zonas de Barcelona pendientes de definir. Los equipos recibirán ayudas de hasta 150.000 € para hacer frente al 80% de la inversión.  

 

Asimismo, en la apuesta de Sorigué por fomentar las sinergias entre sus diferentes departamentos y empresas, el proyecto ha contado con el asesoramiento de Ambitec, la empresa especializada en Infraestructura Verde del grupo empresarial.

 

La experiencia y conocimiento de la compañía en infraestructura verde, ha contribuido a desarrollar la propuesta de vegetación que recubre la fachada exterior del edificio, aportando mejoras térmicas y de aislamiento.  

 

De esta forma, el prototipo fomenta la biodiversidad a través de la inclusión de vegetación y contribuye a implementar un consumo racional del agua en el riego.  

 

A través de estas soluciones, Barcelona busca mejorar el confort, las condiciones de habitabilidad y la sostenibilidad de los edificios actuales, reduciendo el consumo energético y, por lo tanto, las emisiones de CO2.  

 

Además, el concurso se propone hacerlo con unos métodos constructivos de bajas emisiones y con costes limitados que permitan regenerar un volumen suficiente de viviendas en las próximas décadas para incidir en los compromisos de descarbonización.