La sede en Tarragona de Sorigué, inaugurada en noviembre de 2016, ha sido seleccionada entre los cinco finalistas del Premio 3 Diamantes, organizado y patrocinado por Mitsubishi Electric, que reconoce a los mejores edificios de ámbito nacional en materia de eficiencia energética, diseño e innovación, en particular en lo referido a sus instalaciones de climatización.

La 5ª entrega de estos reconocimientos se realizó el pasado mes de junio en Madrid. La propuesta busca reconocer el trabajo de los profesionales del sector en su labor de diseño, redacción y especificación de proyectos.

El primer premio ha sido para el edificio Paseo de la Castella 76, en Madrid, realizado por el Estudio Ros. En segundo lugar, se encuentra la Torre Mapfre, en Barcelona, de JG Ingenieros. En tercera posición, las oficinas Vichy Catalan, de Barcelona, realizadas por Wattia & B01 Arquitectes

El concurso ha valorado la labor de otros dos edificios que han obtenido el cuarto y el quinto puesto. Se trata del Centro Comercial Cuatro Caminos, en A Coruña, obra de Medancli, y la sede de Sorigué, en Tarragona, realizado por 080 Arquitectura.

Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), del Ministerio para la Transición Ecológica, el consumo de climatización de los edificios terciarios en España corresponde al 57,2% del consumo total:  un 31% corresponde al consumo de calefacción y un 26,2%, al consumo del aire acondicionado. Además, la producción de agua caliente sanitaria corresponde a un consumo del 3,3%. Estas cifras reflejan la necesidad de trabajar para fomentar el ahorro y la eficiencia energética para un mayor desarrollo sostenible.

La sede de Sorigué en Tarragona se ubica en una parcela de 5.000m2 en el Polígono Industrial Riu Clar. Las oficinas abarcan 800m2 y los talleres-almacenes, 2000m2. El cierre del edificio se ha realizado con paneles prefabricados de hormigón armado y acabado en zinc transpirable, impermeable y sin textura.

El inmueble aprovecha la luz natural mediante lucernarios y paramentos verticales translúcidos de policarbonato y produce energía con las placas fotovoltaicas instaladas en la cubierta de las oficinas, lo que ha permitido la obtención del certificado de clasificación energética A para el edificio.