Vigilancia, operación y mantenimiento conducción Júcar-Vinalopó
Vigilancia, operación y mantenimiento conducción Júcar-Vinalopó
Servicio de operación de la captación, entrega de agua a usuario final y mantenimiento de las infraestructuras del trasvase, con gestión de personal.
Las infraestructuras que componen el sistema Júcar-Vinalopó captan 4.500 litros de agua por segundo en el río Júcar, a unos cincuenta metros aguas arriba del azud de la Marquesa en Cullera, Valencia.
El agua recogida se eleva hasta el embalse de San Diego en Villena, Alicante, que cuenta con una capacidad de 20 hm3. En el trayecto, pasa por una serie de estaciones de bombeo y sus balsas asociadas y por más de 90 km de conducciones entre tuberías túneles. De esta forma se consigue salvar un desnivel de más de 600 m y el agua puede ser distribuida a los usuarios finales.
Se estima una época de bombeo continuada de 6 meses al año dedicando los meses restantes a la realización de los mantenimientos preventivos, normativos y las revisiones necesarias.
Datos técnicos
Infraestructuras del trasvase
La conducción tiene una longitud total de 93,250 km y se inicia 50 m aguas arriba del azud de la Marquesa (Cullera). La alimentación de agua de la central de bombeo ha sido proyectada mediante un conducto de 1,60 m de diámetro y 207 m de longitud, en PRFV.
Está compuesto por 4 estaciones de bombeo en serie. La estación de bombeo se ha proyectado con 3+1 grupos motobombas sumergibles de 340 Kwh de potencia y Qu= 4256 m3/h. La balsa de Panser tiene una capacidad útil de 200.000 m3.
Junto a la balsa de Panser se encuentra la estación de bombeo dotada con cinco (4+1) bombas con un Qu=4.050 m3/h, igual que las estaciones de Llanera y Moixent.
La conducción atraviesa la sierra de la Corbera mediante dos túneles de 2.744 y 3748 ml, respectivamente, donde el agua circula a lámina libre.
Los medios humanos en el servicio están compuestos de cinco perfiles técnicos y operarios del sistema. Concretamente, un jefe del servicio, responsables de obra civil y equipos eléctricos, jefe de operación y mantenimiento y un encargado, así como 6 operarios de operación y mantenimiento y 3 operadores de centro de control.
Es el primer contrato que implantará las medidas de protección frente al mejillón cebra.